martes, 10 de junio de 2014

MI FABULA, TÚ


Yo sé que te prometí un cuento,
Que hable de tus sueños de niña,
De cómo te han mentido los presidentes,
Del miedo que sientes al descubrir una nueva arruga.
Yo sé que te prometí un cuento,
Que hable de aquella fuente sin monedas
Y del primer beso que no supo tan bien,
Que hable de las montañas que mirabas
Y nunca pudiste alcanzar.
Yo sé que te debo un cuento,
Que hable de los sueños a los que fue necesario renunciar,
 de tu picardía al verte en las vidrieras,
que hable de aquella traición
que tus ojos olvidarán como un nombre en la playa.
Yo sé que te debo un cuento,
Que hable de aquel secreto
Que con nadie compartirás.
Que hable de aquel dolor
Que un día te nubló todo por dentro.
Yo sé que te debo un cuento,
Que recupere las olas de tu mar
Y que arranque las lágrimas de tu calendario,
Que te dé lo que esperabas de la vida,
Que te diga que el mundo es tuyo,
Y que la reina de esta fábula sos vos.






TODO VOLVERA

Tiene leña la casa de la niñez,

Más que leña, guitarra.

Cómo echarte al olvido.

La galería y mi abuelo,

El limonero y los mangos.

El mesón gigante, las risas y el pan.

La ternura de un perro jugando

Conmigo entre las plantas.

La siesta sagrada y el temor al duende.

Las manos con harina de aquella

Tía solterona.

Qué lindo era, desde allí,

Mirar el cielo de Tucumán.

No quiero otra suerte

Que la de volverte a ver.




CALLES DE MADRUGADA

Perro viejo, callejero, te veo beber de un charco al costado de la calle. Un gato se acerca y bebe a sus anchas. No sé si has visto en el agua tus ojos cansados, tus ojos oscuros de oscura hora. Sí sé que suspiraste, sí sé que al desaparecer calle abajo, y me miraste, también comprendiste.